Adaptar la rutina diaria es una forma importante de poder continuar disfrutando de una vida plena. Al centrarse en lo que puede hacer conseguirá mantener la independencia y continuar con muchas de sus actividades normales.
Puede plantearse la necesidad de realizar ajustes como, por ejemplo, cambiar la forma de viajar o dar paseos más breves. La hora también es importante: busque una hora del día en la que la medicación funcione bien para embarcarse en cualquier actividad extenuante. Dese tiempo siempre y descanse si es necesario. Recuerde asignar prioridades de modo que se pueda encargar de las tareas importantes primero.
Son muchos los trucos y consejos útiles que puede aplicar en su casa. Si ajusta la distribución de la cocina podrá preparar las comidas con mayor seguridad y más fácilmente o, quizá, el cambiar el tipo de suela de sus zapatos le ayudará a prevenir las caídas.
Existen también infinidad de tipos de equipamiento especializado que le ayudarán con sus actividades como lavar, vestirse o comer. Pida a su médico que le derive a un terapeuta ocupacional que le pueda asesorar sobre dicho tipo de equipos y sobre las modificaciones en su entorno o su rutina. Para obtener una gama más amplia de sugerencias que le ayuden en sus actividades, desde vestirse o conducir a moverse o recordar, visite
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